El Almería busca un título ignoto

El Almería busca el campeonato de la categoría por primera vez en su historia. La victoria del Pucela en Ipurúa hace que los rojiblancos no puedan ascender el próximo viernes (21:00 horas) en San Sebastián, pero a su vez ha permitido que ocupen el liderato cuatro meses después. Y a falta de apenas tres jornadas para la finalización del campeonato, aunque el objetivo prioritario sea el ascenso a Primera División, en el vestuario indálico pone el reto de ser el campeón de la categoría. En caso de vencer sus tres partidos que restan, la UDA obtendría el título de la división de plata por primera vez en su historia.

Tras visitar a una Real Sociedad B con urgencias y que cree más que nunca en la permanencia, los de Rubi recibirán el sábado 21 (21:00) a un Alcorcón ya descendido y se desplazarán hasta Butarque el domingo 29 (18:30) para medirse a un Leganés sin nada en juego. Entre numerosos retos por lograr en este final de curso, destaca el de campeón, puesto que nunca antes en su historia lo ha logrado. La UD Almería subió en 2007 como segundo clasificado (por detrás del Valladolid), mientras que en 2013 ascendió en la promoción tras quedar en el tercer escalafón en la fase regular por detrás del Elche y del Villarreal. Sí lo logró la extinta AD Almería en 1979: en la temporada de su estreno en Segunda División fue campeona, subiendo de Tercera a Primera en tan solo tres años.

Escudo/Bandera Almería

El actual club no lo ha conseguido. De hecho, hasta esta temporada apenas había probado la primera posición de la categoría de plata. Sólo miró desde lo más arriba en seis jornadas de toda su historia: la 11 del ejercicio 02-03; la 6 del 11-12, las 1, 6 y 7 del 19-20; y la en la 24 de 20-21. En la presente temporada sí se ha acostumbrado al primer puesto: fue líder en la primera fecha, en la octava y en la novena, y de la undécima a la vigésimo tercera. A principio de año el Eibar se lo arrebató en el Estadio de los Juegos Mediterráneos dentro de ese enero negro de los almerienses y ahora los de Rubi lo han recuperado tras el pinchazo de los armeros frente al Valladolid.

Con el título de campeón el Almería pretende poner el broche de oro a una temporada en la que ha vivido en las alturas de principio a fin. Nunca ha bajado de la quinta posición y desde la jornada 6 siempre ha estado en el podio. Buena prueba de la regularidad del conjunto almeriense es que de las 39 jornadas, hasta en 35 ha estado en un ascenso directo que podría certificar esta semana si el viernes vence en Anoeta y el sábado pierde el Valladolid en su feudo el duelo regional ante la Ponferradina, o si venciendo los almerienses en San Sebastián, el Pucela empata y el Eibar pierde en Butarque.

El Almería busca un título ignoto

El Almería busca el campeonato de la categoría por primera vez en su historia. La victoria del Pucela en Ipurúa hace que los rojiblancos no puedan ascender el próximo viernes (21:00 horas) en San Sebastián, pero a su vez ha permitido que ocupen el liderato cuatro meses después. Y a falta de apenas tres jornadas para la finalización del campeonato, aunque el objetivo prioritario sea el ascenso a Primera División, en el vestuario indálico pone el reto de ser el campeón de la categoría. En caso de vencer sus tres partidos que restan, la UDA obtendría el título de la división de plata por primera vez en su historia.

Tras visitar a una Real Sociedad B con urgencias y que cree más que nunca en la permanencia, los de Rubi recibirán el sábado 21 (21:00) a un Alcorcón ya descendido y se desplazarán hasta Butarque el domingo 29 (18:30) para medirse a un Leganés sin nada en juego. Entre numerosos retos por lograr en este final de curso, destaca el de campeón, puesto que nunca antes en su historia lo ha logrado. La UD Almería subió en 2007 como segundo clasificado (por detrás del Valladolid), mientras que en 2013 ascendió en la promoción tras quedar en el tercer escalafón en la fase regular por detrás del Elche y del Villarreal. Sí lo logró la extinta AD Almería en 1979: en la temporada de su estreno en Segunda División fue campeona, subiendo de Tercera a Primera en tan solo tres años.

Escudo/Bandera Almería

El actual club no lo ha conseguido. De hecho, hasta esta temporada apenas había probado la primera posición de la categoría de plata. Sólo miró desde lo más arriba en seis jornadas de toda su historia: la 11 del ejercicio 02-03; la 6 del 11-12, las 1, 6 y 7 del 19-20; y la en la 24 de 20-21. En la presente temporada sí se ha acostumbrado al primer puesto: fue líder en la primera fecha, en la octava y en la novena, y de la undécima a la vigésimo tercera. A principio de año el Eibar se lo arrebató en el Estadio de los Juegos Mediterráneos dentro de ese enero negro de los almerienses y ahora los de Rubi lo han recuperado tras el pinchazo de los armeros frente al Valladolid.

Con el título de campeón el Almería pretende poner el broche de oro a una temporada en la que ha vivido en las alturas de principio a fin. Nunca ha bajado de la quinta posición y desde la jornada 6 siempre ha estado en el podio. Buena prueba de la regularidad del conjunto almeriense es que de las 39 jornadas, hasta en 35 ha estado en un ascenso directo que podría certificar esta semana si el viernes vence en Anoeta y el sábado pierde el Valladolid en su feudo el duelo regional ante la Ponferradina, o si venciendo los almerienses en San Sebastián, el Pucela empata y el Eibar pierde en Butarque.

El Almería busca un título ignoto

El Almería busca el campeonato de la categoría por primera vez en su historia. La victoria del Pucela en Ipurúa hace que los rojiblancos no puedan ascender el próximo viernes (21:00 horas) en San Sebastián, pero a su vez ha permitido que ocupen el liderato cuatro meses después. Y a falta de apenas tres jornadas para la finalización del campeonato, aunque el objetivo prioritario sea el ascenso a Primera División, en el vestuario indálico pone el reto de ser el campeón de la categoría. En caso de vencer sus tres partidos que restan, la UDA obtendría el título de la división de plata por primera vez en su historia.

Tras visitar a una Real Sociedad B con urgencias y que cree más que nunca en la permanencia, los de Rubi recibirán el sábado 21 (21:00) a un Alcorcón ya descendido y se desplazarán hasta Butarque el domingo 29 (18:30) para medirse a un Leganés sin nada en juego. Entre numerosos retos por lograr en este final de curso, destaca el de campeón, puesto que nunca antes en su historia lo ha logrado. La UD Almería subió en 2007 como segundo clasificado (por detrás del Valladolid), mientras que en 2013 ascendió en la promoción tras quedar en el tercer escalafón en la fase regular por detrás del Elche y del Villarreal. Sí lo logró la extinta AD Almería en 1979: en la temporada de su estreno en Segunda División fue campeona, subiendo de Tercera a Primera en tan solo tres años.

Escudo/Bandera Almería

El actual club no lo ha conseguido. De hecho, hasta esta temporada apenas había probado la primera posición de la categoría de plata. Sólo miró desde lo más arriba en seis jornadas de toda su historia: la 11 del ejercicio 02-03; la 6 del 11-12, las 1, 6 y 7 del 19-20; y la en la 24 de 20-21. En la presente temporada sí se ha acostumbrado al primer puesto: fue líder en la primera fecha, en la octava y en la novena, y de la undécima a la vigésimo tercera. A principio de año el Eibar se lo arrebató en el Estadio de los Juegos Mediterráneos dentro de ese enero negro de los almerienses y ahora los de Rubi lo han recuperado tras el pinchazo de los armeros frente al Valladolid.

Con el título de campeón el Almería pretende poner el broche de oro a una temporada en la que ha vivido en las alturas de principio a fin. Nunca ha bajado de la quinta posición y desde la jornada 6 siempre ha estado en el podio. Buena prueba de la regularidad del conjunto almeriense es que de las 39 jornadas, hasta en 35 ha estado en un ascenso directo que podría certificar esta semana si el viernes vence en Anoeta y el sábado pierde el Valladolid en su feudo el duelo regional ante la Ponferradina, o si venciendo los almerienses en San Sebastián, el Pucela empata y el Eibar pierde en Butarque.

El Almería busca un título ignoto

El Almería busca el campeonato de la categoría por primera vez en su historia. La victoria del Pucela en Ipurúa hace que los rojiblancos no puedan ascender el próximo viernes (21:00 horas) en San Sebastián, pero a su vez ha permitido que ocupen el liderato cuatro meses después. Y a falta de apenas tres jornadas para la finalización del campeonato, aunque el objetivo prioritario sea el ascenso a Primera División, en el vestuario indálico pone el reto de ser el campeón de la categoría. En caso de vencer sus tres partidos que restan, la UDA obtendría el título de la división de plata por primera vez en su historia.

Tras visitar a una Real Sociedad B con urgencias y que cree más que nunca en la permanencia, los de Rubi recibirán el sábado 21 (21:00) a un Alcorcón ya descendido y se desplazarán hasta Butarque el domingo 29 (18:30) para medirse a un Leganés sin nada en juego. Entre numerosos retos por lograr en este final de curso, destaca el de campeón, puesto que nunca antes en su historia lo ha logrado. La UD Almería subió en 2007 como segundo clasificado (por detrás del Valladolid), mientras que en 2013 ascendió en la promoción tras quedar en el tercer escalafón en la fase regular por detrás del Elche y del Villarreal. Sí lo logró la extinta AD Almería en 1979: en la temporada de su estreno en Segunda División fue campeona, subiendo de Tercera a Primera en tan solo tres años.

Escudo/Bandera Almería

El actual club no lo ha conseguido. De hecho, hasta esta temporada apenas había probado la primera posición de la categoría de plata. Sólo miró desde lo más arriba en seis jornadas de toda su historia: la 11 del ejercicio 02-03; la 6 del 11-12, las 1, 6 y 7 del 19-20; y la en la 24 de 20-21. En la presente temporada sí se ha acostumbrado al primer puesto: fue líder en la primera fecha, en la octava y en la novena, y de la undécima a la vigésimo tercera. A principio de año el Eibar se lo arrebató en el Estadio de los Juegos Mediterráneos dentro de ese enero negro de los almerienses y ahora los de Rubi lo han recuperado tras el pinchazo de los armeros frente al Valladolid.

Con el título de campeón el Almería pretende poner el broche de oro a una temporada en la que ha vivido en las alturas de principio a fin. Nunca ha bajado de la quinta posición y desde la jornada 6 siempre ha estado en el podio. Buena prueba de la regularidad del conjunto almeriense es que de las 39 jornadas, hasta en 35 ha estado en un ascenso directo que podría certificar esta semana si el viernes vence en Anoeta y el sábado pierde el Valladolid en su feudo el duelo regional ante la Ponferradina, o si venciendo los almerienses en San Sebastián, el Pucela empata y el Eibar pierde en Butarque.

El Almería busca un título ignoto

El Almería busca el campeonato de la categoría por primera vez en su historia. La victoria del Pucela en Ipurúa hace que los rojiblancos no puedan ascender el próximo viernes (21:00 horas) en San Sebastián, pero a su vez ha permitido que ocupen el liderato cuatro meses después. Y a falta de apenas tres jornadas para la finalización del campeonato, aunque el objetivo prioritario sea el ascenso a Primera División, en el vestuario indálico pone el reto de ser el campeón de la categoría. En caso de vencer sus tres partidos que restan, la UDA obtendría el título de la división de plata por primera vez en su historia.

Tras visitar a una Real Sociedad B con urgencias y que cree más que nunca en la permanencia, los de Rubi recibirán el sábado 21 (21:00) a un Alcorcón ya descendido y se desplazarán hasta Butarque el domingo 29 (18:30) para medirse a un Leganés sin nada en juego. Entre numerosos retos por lograr en este final de curso, destaca el de campeón, puesto que nunca antes en su historia lo ha logrado. La UD Almería subió en 2007 como segundo clasificado (por detrás del Valladolid), mientras que en 2013 ascendió en la promoción tras quedar en el tercer escalafón en la fase regular por detrás del Elche y del Villarreal. Sí lo logró la extinta AD Almería en 1979: en la temporada de su estreno en Segunda División fue campeona, subiendo de Tercera a Primera en tan solo tres años.

Escudo/Bandera Almería

El actual club no lo ha conseguido. De hecho, hasta esta temporada apenas había probado la primera posición de la categoría de plata. Sólo miró desde lo más arriba en seis jornadas de toda su historia: la 11 del ejercicio 02-03; la 6 del 11-12, las 1, 6 y 7 del 19-20; y la en la 24 de 20-21. En la presente temporada sí se ha acostumbrado al primer puesto: fue líder en la primera fecha, en la octava y en la novena, y de la undécima a la vigésimo tercera. A principio de año el Eibar se lo arrebató en el Estadio de los Juegos Mediterráneos dentro de ese enero negro de los almerienses y ahora los de Rubi lo han recuperado tras el pinchazo de los armeros frente al Valladolid.

Con el título de campeón el Almería pretende poner el broche de oro a una temporada en la que ha vivido en las alturas de principio a fin. Nunca ha bajado de la quinta posición y desde la jornada 6 siempre ha estado en el podio. Buena prueba de la regularidad del conjunto almeriense es que de las 39 jornadas, hasta en 35 ha estado en un ascenso directo que podría certificar esta semana si el viernes vence en Anoeta y el sábado pierde el Valladolid en su feudo el duelo regional ante la Ponferradina, o si venciendo los almerienses en San Sebastián, el Pucela empata y el Eibar pierde en Butarque.

El Almería busca un título ignoto

El Almería busca el campeonato de la categoría por primera vez en su historia. La victoria del Pucela en Ipurúa hace que los rojiblancos no puedan ascender el próximo viernes (21:00 horas) en San Sebastián, pero a su vez ha permitido que ocupen el liderato cuatro meses después. Y a falta de apenas tres jornadas para la finalización del campeonato, aunque el objetivo prioritario sea el ascenso a Primera División, en el vestuario indálico pone el reto de ser el campeón de la categoría. En caso de vencer sus tres partidos que restan, la UDA obtendría el título de la división de plata por primera vez en su historia.

Tras visitar a una Real Sociedad B con urgencias y que cree más que nunca en la permanencia, los de Rubi recibirán el sábado 21 (21:00) a un Alcorcón ya descendido y se desplazarán hasta Butarque el domingo 29 (18:30) para medirse a un Leganés sin nada en juego. Entre numerosos retos por lograr en este final de curso, destaca el de campeón, puesto que nunca antes en su historia lo ha logrado. La UD Almería subió en 2007 como segundo clasificado (por detrás del Valladolid), mientras que en 2013 ascendió en la promoción tras quedar en el tercer escalafón en la fase regular por detrás del Elche y del Villarreal. Sí lo logró la extinta AD Almería en 1979: en la temporada de su estreno en Segunda División fue campeona, subiendo de Tercera a Primera en tan solo tres años.

Escudo/Bandera Almería

El actual club no lo ha conseguido. De hecho, hasta esta temporada apenas había probado la primera posición de la categoría de plata. Sólo miró desde lo más arriba en seis jornadas de toda su historia: la 11 del ejercicio 02-03; la 6 del 11-12, las 1, 6 y 7 del 19-20; y la en la 24 de 20-21. En la presente temporada sí se ha acostumbrado al primer puesto: fue líder en la primera fecha, en la octava y en la novena, y de la undécima a la vigésimo tercera. A principio de año el Eibar se lo arrebató en el Estadio de los Juegos Mediterráneos dentro de ese enero negro de los almerienses y ahora los de Rubi lo han recuperado tras el pinchazo de los armeros frente al Valladolid.

Con el título de campeón el Almería pretende poner el broche de oro a una temporada en la que ha vivido en las alturas de principio a fin. Nunca ha bajado de la quinta posición y desde la jornada 6 siempre ha estado en el podio. Buena prueba de la regularidad del conjunto almeriense es que de las 39 jornadas, hasta en 35 ha estado en un ascenso directo que podría certificar esta semana si el viernes vence en Anoeta y el sábado pierde el Valladolid en su feudo el duelo regional ante la Ponferradina, o si venciendo los almerienses en San Sebastián, el Pucela empata y el Eibar pierde en Butarque.

El Almería busca un título ignoto

El Almería busca el campeonato de la categoría por primera vez en su historia. La victoria del Pucela en Ipurúa hace que los rojiblancos no puedan ascender el próximo viernes (21:00 horas) en San Sebastián, pero a su vez ha permitido que ocupen el liderato cuatro meses después. Y a falta de apenas tres jornadas para la finalización del campeonato, aunque el objetivo prioritario sea el ascenso a Primera División, en el vestuario indálico pone el reto de ser el campeón de la categoría. En caso de vencer sus tres partidos que restan, la UDA obtendría el título de la división de plata por primera vez en su historia.

Tras visitar a una Real Sociedad B con urgencias y que cree más que nunca en la permanencia, los de Rubi recibirán el sábado 21 (21:00) a un Alcorcón ya descendido y se desplazarán hasta Butarque el domingo 29 (18:30) para medirse a un Leganés sin nada en juego. Entre numerosos retos por lograr en este final de curso, destaca el de campeón, puesto que nunca antes en su historia lo ha logrado. La UD Almería subió en 2007 como segundo clasificado (por detrás del Valladolid), mientras que en 2013 ascendió en la promoción tras quedar en el tercer escalafón en la fase regular por detrás del Elche y del Villarreal. Sí lo logró la extinta AD Almería en 1979: en la temporada de su estreno en Segunda División fue campeona, subiendo de Tercera a Primera en tan solo tres años.

Escudo/Bandera Almería

El actual club no lo ha conseguido. De hecho, hasta esta temporada apenas había probado la primera posición de la categoría de plata. Sólo miró desde lo más arriba en seis jornadas de toda su historia: la 11 del ejercicio 02-03; la 6 del 11-12, las 1, 6 y 7 del 19-20; y la en la 24 de 20-21. En la presente temporada sí se ha acostumbrado al primer puesto: fue líder en la primera fecha, en la octava y en la novena, y de la undécima a la vigésimo tercera. A principio de año el Eibar se lo arrebató en el Estadio de los Juegos Mediterráneos dentro de ese enero negro de los almerienses y ahora los de Rubi lo han recuperado tras el pinchazo de los armeros frente al Valladolid.

Con el título de campeón el Almería pretende poner el broche de oro a una temporada en la que ha vivido en las alturas de principio a fin. Nunca ha bajado de la quinta posición y desde la jornada 6 siempre ha estado en el podio. Buena prueba de la regularidad del conjunto almeriense es que de las 39 jornadas, hasta en 35 ha estado en un ascenso directo que podría certificar esta semana si el viernes vence en Anoeta y el sábado pierde el Valladolid en su feudo el duelo regional ante la Ponferradina, o si venciendo los almerienses en San Sebastián, el Pucela empata y el Eibar pierde en Butarque.

El Almería busca un título ignoto

El Almería busca el campeonato de la categoría por primera vez en su historia. La victoria del Pucela en Ipurúa hace que los rojiblancos no puedan ascender el próximo viernes (21:00 horas) en San Sebastián, pero a su vez ha permitido que ocupen el liderato cuatro meses después. Y a falta de apenas tres jornadas para la finalización del campeonato, aunque el objetivo prioritario sea el ascenso a Primera División, en el vestuario indálico pone el reto de ser el campeón de la categoría. En caso de vencer sus tres partidos que restan, la UDA obtendría el título de la división de plata por primera vez en su historia.

Tras visitar a una Real Sociedad B con urgencias y que cree más que nunca en la permanencia, los de Rubi recibirán el sábado 21 (21:00) a un Alcorcón ya descendido y se desplazarán hasta Butarque el domingo 29 (18:30) para medirse a un Leganés sin nada en juego. Entre numerosos retos por lograr en este final de curso, destaca el de campeón, puesto que nunca antes en su historia lo ha logrado. La UD Almería subió en 2007 como segundo clasificado (por detrás del Valladolid), mientras que en 2013 ascendió en la promoción tras quedar en el tercer escalafón en la fase regular por detrás del Elche y del Villarreal. Sí lo logró la extinta AD Almería en 1979: en la temporada de su estreno en Segunda División fue campeona, subiendo de Tercera a Primera en tan solo tres años.

Escudo/Bandera Almería

El actual club no lo ha conseguido. De hecho, hasta esta temporada apenas había probado la primera posición de la categoría de plata. Sólo miró desde lo más arriba en seis jornadas de toda su historia: la 11 del ejercicio 02-03; la 6 del 11-12, las 1, 6 y 7 del 19-20; y la en la 24 de 20-21. En la presente temporada sí se ha acostumbrado al primer puesto: fue líder en la primera fecha, en la octava y en la novena, y de la undécima a la vigésimo tercera. A principio de año el Eibar se lo arrebató en el Estadio de los Juegos Mediterráneos dentro de ese enero negro de los almerienses y ahora los de Rubi lo han recuperado tras el pinchazo de los armeros frente al Valladolid.

Con el título de campeón el Almería pretende poner el broche de oro a una temporada en la que ha vivido en las alturas de principio a fin. Nunca ha bajado de la quinta posición y desde la jornada 6 siempre ha estado en el podio. Buena prueba de la regularidad del conjunto almeriense es que de las 39 jornadas, hasta en 35 ha estado en un ascenso directo que podría certificar esta semana si el viernes vence en Anoeta y el sábado pierde el Valladolid en su feudo el duelo regional ante la Ponferradina, o si venciendo los almerienses en San Sebastián, el Pucela empata y el Eibar pierde en Butarque.

La pizarra acerca al Almería a Primera

El Almería suma y sigue. Esta vez la víctima fue el Amorebieta en un partido gris, con poco brillo, en el que la estrategia fue el gran argumento rojiblanco para sumar tres puntos de oro que le colocan más cerca de Primera. El triunfo supone el liderato provisional a expensas de lo que hagan Eibar y Valladolid este domingo en Ipurua y deja a los de Rubi a seis puntos del ascenso. Pero si el Valladolid no gana en Eibar, a los rojiblancos les bastaría con sumar tres puntos en las tres últimas jornadas y podrían subir el próximo viernes en Anoeta.

Las cuentas las marcarán el partidazo de Ipurua, pero Rubi trata de mantener a los suyos al margen de las cábalas y continúa exprimiendo a una plantilla que ha mostrado una regularidad enorme durante todo el campeonato. La meta está cada vez más cerca. Y los síntomas que desprende el equipo son de una gran fiabilidad.

Escudo/Bandera Almería

Esta vez le faltó brillo, sobre todo en el primer tiempo, pero encontró auxilio en la pizarra. Un córner y una falta lateral fueron suficientes para desarmar a un Amorebieta serio, bien plantado, pero demasiado timorato en ataque. Tuvo la ocasión más clara en el primer tiempo el cuadro visitante, pero el remate y el posterior rechace de Obieta ante Fernando no encontraron portería. Al Almería le costó encontrarse en el partido. Una contra muy mal conducida por Sadiq y una llegada al área de Pozo completaron la escasa hoja de servicios rojiblanca en el primer tiempo.

Marino no salió en una sola foto hasta el minuto 53, cuando le hizo un paradón a Portillo. Y repitió segundos después, tras el saque de esquina. Pero esta vez para sacar el balón de la red. El sol jugó una mala pasada a Samu Costa, Sadiq y Andoni López y el balón impactó finalmente en el defensor del equipo vasco y acabó en la portería. El 1-0 cambió el partido y mandó a la lona al Amorebieta.

Escudo/Bandera SD Amorebieta

Los indálicos fabricaron también a balón parado el gol de la tranquilidad. Fue Babic, de soberbio cabezazo, el que disparó la euforia en la grada. Hubo tiempo también para que Sadiq acabase con su mala racha de cara a portería. El nigeriano falló un penalti (gran parada de Marino) de San José sobre Pozo decretado por Iglesias Villanueva tras la visita al VAR, pero se desquitó minutos después definiendo con mucha sangre fría un mano a mano ante el meta visitante.

El pichichi del Almería cerró una goleada que acerca notablemente el sueño del ascenso y desató la fiesta en la grada. La hinchada obligó a saludar desde el palco a Turki Al Sheikh, presente en la tribuna del estadio de los Juegos Mediterráneos y despidió a los suyos al grito de “¡A Primera, oé!”. Almería huele el ascenso y nadie quiere que pare la fiesta. El Amorebieta, en cambio, queda a cinco puntos de los puestos de permanencia y se asoma peligrosamente al abismo del descenso.

Cambios

Sergio Moreno (56′, Álvaro Peña), Olaetxea (56′, Koldo Obieta), Carriço (64′, Rodrigo Ely), Eguaras (73′, Lucas Robertone), José Carlos (73′, Ramazani), Gaizka Larrazabal (75′, Aldalur), Seguín (75′, Andoni López), Íñigo Orozco (78′, Peru Nolaskoain), Arvin Appiah (87′, Portillo)

Goles

1-0, 53′: Andoni López, 2-0, 74′: Srdan Babic, 3-0, 88′: Sadiq

Tarjetas

Arbitro: Javier Iglesias Villanueva
Arbitro VAR: David Pérez Pallas
Andoni López (51′,Amarilla) Jon Irazábal (70′,Amarilla) Olaetxea (94′,Amarilla

Clasificación

La pizarra acerca al Almería a Primera

El Almería suma y sigue. Esta vez la víctima fue el Amorebieta en un partido gris, con poco brillo, en el que la estrategia fue el gran argumento rojiblanco para sumar tres puntos de oro que le colocan más cerca de Primera. El triunfo supone el liderato provisional a expensas de lo que hagan Eibar y Valladolid este domingo en Ipurua y deja a los de Rubi a seis puntos del ascenso. Pero si el Valladolid no gana en Eibar, a los rojiblancos les bastaría con sumar tres puntos en las tres últimas jornadas y podrían subir el próximo viernes en Anoeta.

Las cuentas las marcarán el partidazo de Ipurua, pero Rubi trata de mantener a los suyos al margen de las cábalas y continúa exprimiendo a una plantilla que ha mostrado una regularidad enorme durante todo el campeonato. La meta está cada vez más cerca. Y los síntomas que desprende el equipo son de una gran fiabilidad.

Escudo/Bandera Almería

Esta vez le faltó brillo, sobre todo en el primer tiempo, pero encontró auxilio en la pizarra. Un córner y una falta lateral fueron suficientes para desarmar a un Amorebieta serio, bien plantado, pero demasiado timorato en ataque. Tuvo la ocasión más clara en el primer tiempo el cuadro visitante, pero el remate y el posterior rechace de Obieta ante Fernando no encontraron portería. Al Almería le costó encontrarse en el partido. Una contra muy mal conducida por Sadiq y una llegada al área de Pozo completaron la escasa hoja de servicios rojiblanca en el primer tiempo.

Marino no salió en una sola foto hasta el minuto 53, cuando le hizo un paradón a Portillo. Y repitió segundos después, tras el saque de esquina. Pero esta vez para sacar el balón de la red. El sol jugó una mala pasada a Samu Costa, Sadiq y Andoni López y el balón impactó finalmente en el defensor del equipo vasco y acabó en la portería. El 1-0 cambió el partido y mandó a la lona al Amorebieta.

Escudo/Bandera SD Amorebieta

Los indálicos fabricaron también a balón parado el gol de la tranquilidad. Fue Babic, de soberbio cabezazo, el que disparó la euforia en la grada. Hubo tiempo también para que Sadiq acabase con su mala racha de cara a portería. El nigeriano falló un penalti (gran parada de Marino) de San José sobre Pozo decretado por Iglesias Villanueva tras la visita al VAR, pero se desquitó minutos después definiendo con mucha sangre fría un mano a mano ante el meta visitante.

El pichichi del Almería cerró una goleada que acerca notablemente el sueño del ascenso y desató la fiesta en la grada. La hinchada obligó a saludar desde el palco a Turki Al Sheikh, presente en la tribuna del estadio de los Juegos Mediterráneos y despidió a los suyos al grito de “¡A Primera, oé!”. Almería huele el ascenso y nadie quiere que pare la fiesta. El Amorebieta, en cambio, queda a cinco puntos de los puestos de permanencia y se asoma peligrosamente al abismo del descenso.

Cambios

Sergio Moreno (56′, Álvaro Peña), Olaetxea (56′, Koldo Obieta), Carriço (64′, Rodrigo Ely), Eguaras (73′, Lucas Robertone), José Carlos (73′, Ramazani), Gaizka Larrazabal (75′, Aldalur), Seguín (75′, Andoni López), Íñigo Orozco (78′, Peru Nolaskoain), Arvin Appiah (87′, Portillo)

Goles

1-0, 53′: Andoni López, 2-0, 74′: Srdan Babic, 3-0, 88′: Sadiq

Tarjetas

Arbitro: Javier Iglesias Villanueva
Arbitro VAR: David Pérez Pallas
Andoni López (51′,Amarilla) Jon Irazábal (70′,Amarilla) Olaetxea (94′,Amarilla

Clasificación