La UD Ibiza y el CD Lugo se enfrentan este domingo en el estadio Can Misses-Power Electronics (18.15/Movistar LaLiga) en un encuentro al que los ibicencos llegan con la permanencia matemática en el bolsillo, mientras que los gallegos pretenden cerrarla en la isla. El bloque balear, sin embargo, tratará de mantenerse un encuentro más sin perder ante sus aficionados, que en toda la segunda vuelta han visto puntuar a los suyos en el feudo pitiuso (sigue el partido en directo en AS.com).
El encuentro llega también marcado por la contratación de Miguel Ángel Gómez como nuevo director deportivo del Ibiza, que fue presentando este sábado. El andaluz sigue de cerca a la plantilla y los próximos partidos serán determinantes para que acabe de tomar las decisiones pertinentes en cuanto a las bajas y renovaciones para confeccionar la plantilla de la temporada que viene. Vienen nuevos tiempos en la entidad que preside Amadeo Salvo, que siempre busca un crecimiento del Ibiza, tanto en estructura como en la parcela deportiva.
Los celestes tienen la motivación de acabar lo más arriba posible en la tabla clasificatoria en su primera experiencia en LaLiga SmartBank. Y eso pasa por seguir luchando en los cuatro partidos que restan, algo que Paco Jémez, entrenador del equipo ibicenco, ha dejado claro en más de una intervención en rueda de prensa. Nadie puede bajar los brazos. Es una cuestión de profesionalidad y de imagen de club.
Para este encuentro, Jémez contará con la baja de Sergio Castel y de Javi Pérez, ambos por motivos físicos. De hecho, este último probablemente no jugará ya más en lo que resta de temporada, según informó el propio técnico cordobés. Vuelven, sin embargo, Javi Lara y Álvaro Jiménez, recuperados ya de las molestias que le impidieron estar en El Molinón en el duelo frente al Sporting de Gijón.
Jémez también dijo que seguramente seguirá con su política de hacer cambios, para dar entrada a jugadores menos habituales y a los que les quiere recompensar su trabajo. Entre ellos, manifestó que Nono volverá a salir de inicio puesto que el entrenador del bloque pitiuso quedó muy contento con el partido que jugó el extremo en Asturias.
Mientras, el Lugo viaja a Ibiza con nada menos que 25 convocados, incluidos cinco jugadores del filial. El objetivo es sumar una victoria que dé matemáticamente la permanencia y que corte la mala dinámica del equipo, que suma un solo punto de los últimos nueve en disputa.
El once vendrá condicionado por el estado físico de la plantilla, con un amplio abanico de jugadores tocados que llenan de interrogantes las decisiones de Albés. Con todo, se espera un once reconocible con Chris Ramos y Carrillo como referentes en ataque y Alberto Rodríguez, posiblemente el jugador más en forma de los albivermellos, como baluarte defensivo.
Una victoria finiquitaría la temporada, pero en toda la campaña el Lugo solo ha sumado un triunfo a domicilio.